Una madrugada más...

Henos aquí reunidos; al menos a mí y a quién lea esto.

Lo mejor son las noches. Las noches son contradictorias. Para algunos, son los momentos en los cuales se bebe y se "divierte" con más alcohol que sangre en el cuerpo. Y digo "diverte" porque realmente dejas de ser tu mismo y se divierte otro tú. Pero bueno... Para otros, son momentos de peligro. La oscuridad abraza a cada persona creando un sentimiento de... miedo. Yo no opto por ninguna de esas opciones. El mundo duerme, y te encuentras solo. Me parece un gran momento para reflexionar.

Y no puedo evitar seguir en mi incansable búsqueda de la Verdad. Soy consciente de que la Verdad como tal, si existe, no puedo conocerla, no está dentro de mis límites. Dentro de los límites del ser humano. Pero inevitablemente, como miembro de dicha especie no puedo evitar buscar respuestas. Sobretodo a una pregunta que en noches como esta, me quita el sueño.

¿Destino?

 No sé si llegaré a algún acuerdo con mi mismo. Sólo sé, que otra noche estamos aquí. Fascinandome sobre como ocurren los acontecimientos, como se renueva mi vida, y con que irónica precisión lo hace...

El fabuloso destino de Javier Cadenas - III -

- Noche de guardia -

Y siguen las desgracias, para variar. No sólo es el hecho de que día a día voy perdiendo amigos de forma exponencial. Jebi, ha sido de los últimos. ¿Por qué? por liarme con Aury hace algunas semanas. Tras meses de su ruptura, y pese a que tanto Aury como yo somos libres (y que ella tiene tanta culpa como yo), soy visto como el hijo-puta que se va con la chica del amigo. "Tú no consideras a nadie amigo, Javi", me dijo Paula en explicación a el hecho de que había divulgado por ahí conversaciones privadas mías que había tenido en la confianza con ella.

¿Qué le he hecho al mundo? Considero que tengo mucho que aportar, pero que nadie quiere lo que puedo ofrecer... Todo el mundo parece estar en mi contra, esperando a pisotearme... Como el arroyo de la Argamasilla en Écija. Las alcantarillas no dan más a basto y rebosan. Pero aún así mi casa sigue intacta. Imponente encima de su colina particular.


Y así voy a seguir yo. Inexpugnable. Haciendo lo que creo correcto y mejor para todos, aunque todos estén en mi contra. Sé que tengo pocos amigos. Los cuento con los dedos de una mano y me sobran dedos, pero quienes quiera que sean, son mi tesoro. Hoy, es el día en el que CASI me arrio. Igual que pronto será el día en el que el mundo CASI me hunde.

Os toca mover, bastardos.

El fabuloso destino de Javier Cadenas - II -

Henos aquí nuevamente. Bueno, esta vez, retrasmietiendo desde Sevilla. Pues el destino vuelve a dar un golpe fortuito. Nos situamos en un contexto un poco trágico. Atravieso una etapa de mi vida en la que la soledad vuelve a rebosar mis límites, que por suerte, y gracias a toda mi experiencia con ese sentimiento, son bastante resistentes. Pero incluso ellos puedes ceder, como lo hicieron los que custodiaban el cauce del río Génil, que hace desbordó ayer.

Yo me iba a ir el puente a pasarlo con unos amigos, para cambiar de aires y espabilarme. Resulta que el puente ha sido catastrófico en lo que a inundaciones se refiere, pero yo, me ha salvado por un margen escaso de unas horas. Me fui justo antes de que empezara el diluvio. (¿Suerte?)

Esa decisión me evitó la inundación que sobrepasó la capacidad de aguante del río. ¿Podré salvar yo el río que configura mi soledad y mantenerlo dentro de los habituales cauces normales? o, de lo contrario, ¿me veré obligado a huir a otro lado para evitar el desborde?